Esto es como un anticipo. Ciertamente todavía no es el insondable bosque de coníferas de las Landas altas, pero sí un paisaje urbano cerca de la ciudad. Se trata de una muestra, una invitación para que los aventureros se adentren entre las agujas de pinos.
Bosque
Mées
El pueblo forma un ángulo agudo marcado por la famosa «pierre de Tinon». A finales del siglo XIX, los últimos pantanos y ciénagas del municipio se sanearon y redujeron a los actuales humedales.
Sin embargo, quedan algunas ciénagas, como en el Estanque, donde se ha acondicionado una pasarela sobre pilotes que permite descubrir este entorno tan conocido en esta región y que terminará desapareciendo completamente. Este lugar natural emblemático con un valor ecológico excepcional se extiende por un centenar de hectáreas.
Angoumé
Este pequeño pueblo del valle del Adour se desarrolla gracias a la proximidad inmediata de las áreas económicas de Dax y Bayona. Aunque su función es hoy en día principalmente residencial, Angoumé se beneficia del turismo gracias a los alojamientos de casas rurales y habitaciones en casa de huéspedes. A las atractivas instalaciones como los senderos, hay que añadir la buena comida en la sidrería Michel Gracias, situada en una casa de postas reales realizada por Luis XI.
Rivière-Saas-et-Gourby
De lo insólito a Rivière-Saas-et-Gourby… Al bordear la vía férrea se distinguen en las ojivas de la SNCF nidos de cigüeñas. Esta preciosa ave, emblema de Alsacia, ha optado por instalarse aquí, en un lugar incómodo, en la cima de las catenarias de la línea de ferrocarril del TGV Atlantique.
Herm
Para acceder a esta aldea es necesario cruzar las pinedas que rodean el pueblo por todas partes. Los senderos permiten descubrir este patrimonio local: el bosque de los pinos. Herm también es conocido por su club de rugby femenino fundado en 1990: Pachys d’Herm. Desde hace unos 30 años participan en el Campeonato de Francia de Rugby Femenino, contribuyendo así a la notoriedad del rugby de las Landas y de su pueblo de origen.
Gourbera
Al igual que su vecino Herm, esta pequeña aldea se encuentra en el corazón del bosque y vive principalmente de la silvicultura. Senderos (pedestres o BTT) como el recorrido de Gourbera (10 km/3 h), permiten descubrir el bosque de las Landas, pero también los estanques, la fuente de agua ferruguinosa de Bouhette, el pequeño arroyo de Pountinbéou y el Molino de Pouymartet que data de 1540, uno de los más antiguos de las Landas.
